Cortadas y Raspones: Guía para cuidarlas
Una cortada o un raspón puede suceder en cualquier momento de tu día. Todo lo que se necesita es un descuido al cortar el pan y te cortas el dedo. O tropezar con una acera y te lastimas la rodilla.
Sin embargo, estos pequeños percances requieren de nuestra atención. Es clave saber cómo limpiar y cuidar un corte. Pero sobre todo saber cuándo buscar atención médica puede ayudar a reducir la infección y acelerar la curación.
Cómo cuidar una cortada o un raspón
Se estima que los cortes menores o raspones se pueden tratar de manera segura en casa. Pero es clave saber los pasos claves para realizar el cuidado correcto de la herida.
Limpieza
Lava con suavidad: el primer paso es limpiar la herida con agua tibia y jabón suave. Asegúrate de eliminar cualquier suciedad o residuo que pueda haber quedado en la piel.
Enjuaga cuidadosamente: utiliza agua corriente suave para enjuagar la herida. No uses productos agresivos como agua oxigenada o alcohol, ya que pueden dañar el tejido sano.
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Detén el sangrado
Presión directa: si el corte sangra, es clave que se aplique una presión suave con un pañuelo limpio o gasa estéril durante unos minutos para detener el sangrado.
Aplicación de medicación
Uso de un antiséptico: cuando la cortada o raspón esté limpio y sin sangrado. Se recomienda aplicar un antiséptico suave para prevenir infecciones.
Protección y curación
Cubre la herida: prevenir la exposición a bacterias y la fricción es esencial. Por lo que es importante cubrir la cortada o raspón con un apósito adhesivo o una gasa limpia. De igual modo, es importante realizar el cambio el apósito diariamente o cuando esté húmedo o sucio.
Deja que la herida respire: se recomienda que después de los primeros días, si la herida no es profunda. Se deje al aire puede favorecer la cicatrización. Esto permite que la piel se regenere naturalmente. Es por esto que es importante saber: Botiquín Básico: Qué debo tener en caso de un accidente menor
Monitoreo y cuidado continuo de tu cortada o raspón
Observar signos de infección: siempre se debe estar atento ante algún signo de infección como enrojecimiento, hinchazón, dolor excesivo o secreción de pus. Si notas alguno de estos síntomas, busca atención médica.
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Cuando tu cortada o raspón comienza a sanar
Las pequeñas cortaduras y raspones formarán una costra y sanarán en unos pocos días. La costra ayuda a proteger la herida de la suciedad y los gérmenes mientras crece piel nueva debajo.
Es recomendable que cuando se haya formado una costra, no se continúe colocando un vendaje. De igual modo, es importante saber que durante el proceso de curación, la costra causa picazón. Pero es clave no rascarse, se debe esperar a que la costra de la cortada o raspón se caiga por sí sola.
Esto significa que la nueva piel ya está lista y la cortada o raspón ha sanado por completo.
Fuentes a consultar
Treating minor cuts and scrapes. (s/f). WebMD. Recuperado el 2 de noviembre de 2023, de https://www.webmd.com/first-aid/cuts-scrapesTaking care of cuts and scrapes. (s/f). Stanfordchildrens.org. Recuperado el 2 de noviembre de 2023, de https://www.stanfordchildrens.org/en/topic/default?id=taking-care-of-cuts-and-scrapes-1-2978
Cuts and scrapes: First aid. (2021, noviembre 17). Mayo Clinic. https://www.mayoclinic.org/first-aid/first-aid-cuts/basics/art-20056711